Nos ayuda a acceder al niño interior juguetón. Mantiene la liviandad y capacidad de jugar, aún cuando nos enfrentamos a asuntos serios. Alienta la expresión del humor y la risa. Nutre el sentido de no tomar a la vida demasiado en serio. Favorece la experiencia de la vida como un juego divertido y alegre. Para incrementar el sentido de libertad, liviandad y deleite por estar vivos.

Recomendada para:

• Aquellos que trabajaron de más y que necesitan aprender a hacerse el tiempo para iluminar sus vidas y jugar.

• Los que sienten depresión o preocupación crónica.

• Aprender que la vida no necesita ser difícil.

• Niños que tratan el divorcio o trauma de sus padres.

• Poder salir de situaciones problemáticas y reducir la carga emocional.

• Atravesar los últimos estadios del proceso de pena.

• Cualquiera que quiere experimentar una alegría y una actitud más juguetona.

Contiene 30 ml